Teoría U
Hay un consenso de que en el mundo actual se requiere tener un impacto positivo en la sociedad a través de nuestra actividad laboral diaria. Una de las teorías más modernas del cambio es la U, del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT por las iniciales de su nombre en inglés, Massachusetts Institute of Technology). Implica una herramienta para conectar el presente con las oportunidades del futuro generando procesos de innovación y aprendizaje.
La Teoría U es un marco teórico y método que conecta con aspectos auténticos del “self” o uno mismo. Introduce la variable de la autoconciencia en las prácticas sociales y de liderazgo y propone que la calidad de los resultados es una función de la calidad de conciencia y atención que los participantes que operan en el sistema invierten. Este modelo utiliza la metáfora del iceberg: 10% visible versus 90 % invisible.
En este modelo se plantean tres (3) grandes problemas: ecológicos, sociológicos y espirituales.
- El ecológico se resume así: utilizamos mucho más que lo que se puede regenerar. Implica la desconexión entre el self y la naturaleza.
- El sociológico se visualiza con mayores niveles de inequidad, tensiones y fragmentaciones; implica una desconexión entre el self y los otros.
- El espiritual se relaciona con una desconexión entre “self” y “self”: quien soy y quien podría ser y genera como síntomas escasez de energía, depresión, burn out – desgaste profesional-.
En el año 2010 más personas se suicidaron que muertes ocurridas por guerras o tragedias naturales.
La conclusión es que colectivamente creamos resultados
que nadie quiere, como destruir la naturaleza, generar
violencia e infelicidad.
La metáfora del iceberg sirve para explicar los comportamientos subyacentes a esas desconexiones.
Uno los temas clave del 90% son los modelos mentales. Por eso la Teoría U estudió a líderes que crearon algo nuevo y de valor para la sociedad. Brian Arthur investigó los procesos que utilizan dichos líderes para generar cambio e innovación: observar y experienciar, retirarse y reflexionar (intuición), hacer prototipos rápidos y estar en constante feedback –realimentación- con el ecosistema.
Demostró también que este tipo de cambio solo funciona si existe un profundo compromiso en el liderazgo, en la calidad de atención, intención y presencia.
Bill O´brien introdujo tres (3) capacidades de los líderes para innovar: mente abierta (mirada fresca), corazón abierto (empatizar), voluntad abierta (dejar ir y venir).